COBAYA

COBAYA
COBAYA
 
ESPECIE: Cavia porcellus
 
Peso: 700gr – 1,5kg
Capa: gran variedad de colores
 
Promedio de vida: 6-8 años
 
Características físicas: Su cola es muy corta, su cuerpo es largo en relación a sus patas que son muy cortas.
 
Costumbres: Son animales herbívoros originarios de centro y sur América, por lo que no están acostumbradas a las bajas temperaturas.
 
Comportamiento: Son animales de carácter dócil y asustadizo.
 
Consejos: El primer día que esté en casa no dar pienso, simplemente, heno y agua. Evitar atosigarlo la primera semana y a partir de ahí dejar que sea el animal el que quiera acercarse a nosotros, para que no coja miedo. Intenta que otras mascotas no se le acerquen hasta que se acostumbre a su presencia. Debemos tener muchísimo cuidado al manipularle, un gesto brusco o una mala cogida pueden acabar en una fractura fácilmente.
 
Alimentación
Las cobayas son animales herbívoros, por lo que su dieta debe tener altos contenidos de fibra. Esto se logra con una dieta basada en heno. Es el elemento de mayor importancia en la dieta de la cobaya, ya que favorece la correcta digestión y desgaste de dientes.
En segundo lugar, se debe aportar verduras, las cuales en proporción no deben constituir más del 30% de la dieta. Ahora que son pequeños, se debe ir introduciendo poco a poco, ya que el sistema digestivo es aún inmaduro. Debe añadirse paulatinamente, hasta que se dé unas 3 o 4 veces por semana.
Para calcular la ración, se puede tomar como referencia la cabeza de la mascota. Esto nos dará una idea de la que deberá ser la cantidad aproximada que le debemos dar a nuestra cobaya.
Entre las verduras recomendadas están: perejil, diende de león, diferentes coles, hojas de zanahoria (no la zanahoria en sí), rúcula, canónigos… La lechuga no es recomendable ya que contiene mucha agua y pocos nutrientes. Tampoco recomendamos la espinaca porque porque se podrían formar oxalatos.
Las cobayas, concretamente, tienen unos requerimientos especiales de Vitamina C. No la sintetizan, así que es muy importante aportar verduras que sí que la contengan. Un ejemplo sería el perejil y los pimientos rojos, y se debería dar entre 3 a 5 días por semana.
Sobre el pienso se tiende a pensar que es el elemento más importante en la dieta de nuestra cobaya, pero nada más alejado de la realidad. En realidad es prescindible, por ello se aporta en pequeñas cantidades y siempre controlado. Nunca se deja pienso a libre disposición del animal, ya que este tiene un alto contenido de carbohidratos. Teniendo en cuenta que los herbívoros son animales que fermentan en la digestión, esto puede provocar problemas digestivos. Se recomienda ahora que son pequeños, aportar 4 cucharadas de pienso al día, e idealmente distribuyéndolas en mitad de la mañana y mitad de la tarde.
Deberemos dejar siempre agua limpia a disposición. Idealmente es mejor tener un bebedero opaco, para evitar que la luz fomente el crecimiento de algas en el interior. Se deberá lavar y rellenar con regularidad.
¡IMPORTANTE! Entre los alimentos prohibudos están: frutas en general (sólo se permite la manzana en pequeñas cantidades), chocolate, dulces, azúcares en general y frutos secos.
 
Cuidados sanitarios
En el caso de la cobaya no existe vacuna comercializada. Aún así, hay que tener control en el caso de parásitos externos (pulgas, garrapatas, ácaros y piojos) y parásitos internos (coccidiosm criptosporidios…). Inicialmente al llegar a la tienda se desparasitan. En casa, generalmente no se realiza tratamiento preventivo, sino que se tratan cuando se diagnostican, ya que al no tener contacto con otros animales ni comer hierbas del suelo la incidencia es muy baja.
Los herbívoros tienden a sufrir de enfermedades del sistema digestivo, por lo que ante cualquier muestra de diarrea, sobrecrecimiento dental, bruxismo o salivación excesiva es signo de enfermedad y debe revisarse.
Se recomienda realizar una revisión anual con el veterinario de exóticos.
 
Alojamiento
Se deberá alojar en un lugar de la casa que esté libre de corrientes de viento y frío. Son animales muy sensibles a los cambios de temperatura y se pueden ver rápidamente afectados por ello.
La jaula deberá contar con un refugio tapado y un substrato absorvente, idealmente de papel prensado, ya que este no contiene polvo que pueda dañar los ojos y vías aéreas. El serrín en este caso no es nada recomendable. Y si se ingiriese algo de papel no habría problema. Se deberá cambiar cada 10-15 días en su totalidad.
El tamaño de la jaula deberá ser lo suficientemente grande para que pueda recorrerla con libertad.
Para enriquecer el ambiente y favorecer el limado de los dientes que crecen continuamente se deben añadir elementos como trozos o puentes de madera, barras de calcio, juguetes duros específicos para ellos, etc.
Al añadir heno, también debemos contar en ponerle el sufuciente para que puedan construir su refugio con ello.
Poco a poco, se puede acostumbrar a la mascota a salir de su refugio y dejarla correr con algo más de libertad por la casa. Siempre se debe hacer en una habitación o corral controlado, vigilando cables o materiales que puedan dañar al animal o al mobiliario.
Zoonisis: Dermatofitosis, tularemia, por parásitos, giardiasis.
 
El propietario se compromete a cuidar y respetar a su mascota y, en ningún caso, maltratarla, ni abandonarla o liberarla al medio e informar de cualquier signo de enfermedad las primeras 24 horas.
El vendedor garantiza el animal descrito por un plazo de 24 horas en caso de proceso vírico y /o muerte causada por enfermedad de incubación contraída con anterioridad a la fecha y hora de la venta. El cómputo de plazos toma como inicio el día y la hora de la venta.